martes, 29 de noviembre de 2011

Las mujeres en la política de la representación

Lia Cigarini

"Porque si afirmas que es fundamental estar en esa institución para dar visibilidad a la diferencia, quieres decir que le das mucho valor a ese lugar, instituido por hombres de una clase social después de que ésta obtuvo un excedente de fuerza economica y de saber. Y muestras que no piensas que entre nosotras empieza a afirmarse una fuente femenina de autoridad social.
Y ¿quién me dice que las mujeres quieren estar en todas las instituciones existentes, el parlamento, el ejercito, la iglesia? Algunas sí, pero cuando una entra en el ejército o en la iglesia entra claramente sólo por sí misma, mientras que la que entra en el parlamento, que es la institución de la representación, y entra encima con la idea de una posible representación femenina, tapa la voluntad de las que se mantienen fuera.
...
La mirada se acostumbra enseguida a ver una mujer en el lugar de un hombre, cuando ella desempeña las funciones previstas por un orden social pensado por los hombres. La significación de la diferencia sexual no se puede dar sin transgresión, sin subversión de lo existente. No se puede calcar del orden simbólico recibido...
Pienso, finalmente, que, de por sí, una mayor presencia femenina en el parlamento no molesta, porque las representantes tienen que aceptar muchas mediaciones potentes: con el partido que hace que sean elegidas, con su inevitable adhesión y legitimación del poder masculino que ahí se expresa y todas las mediaciones que requiere el legislar. Mediaciones y censuras de los deseos femeninos mucho más drásticas que los famosos velos con los que el imaginario masculino cubrió el cuerpo femenino."

La cultura patas arriba. Libreria de Mujeres de Milán.
Sobre la representación política femenina y sobre la revolución científica en curso
Sottosopra azul (junio, 1987)
La separación femenina. Lia Cigarina

Leo las reflexiones de esta mujer, de los orígenes del pensamiento de la diferencia sexual hace más de veinte años, y me resultan de plena actualidad. Hoy decimos en la calle lo que tanta gente pensamos hace mucho tiempo: "que no, que no, que no nos representan". En estos tiempos que muchas mujeres tienen cargos de poder y representación de alto nivel y ha habido un gobierno paritario incluso, brillan con más luminosidad estos pensamientos.

2 comentarios:

  1. Pues eso, ¡que no nos representan! Besos.

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  2. Qué listas estas mujeres de la Librería de Milán y que pronto se dieron cuenta de ciertas cosas.

    besitos

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