miércoles, 7 de septiembre de 2011

el cuento del antepasado, de Richard Dawkins

Richard Dawkins, autor de El cuento del antepasado

"Una conclusión pasmosa es que, en el caso de determinados genes, el lector está más emparentado con algunos chimpancés que con algunos humanos, y yo soy pariente más cercano de algunos chimpancés que del lector (o de sus chimpancés). Los humanos como especies, y también como individuos, somos recipientes temporales que contienen una mezcla de genes de diferente procedencia. Los individuos somos puntos de encuentro temporales en el entramado de caminos que los genes siguen a lo largo de la historia. Es una forma de expresar, con la terminología de los árboles genéticos, el mensaje central de mi primer libro, El gen egoísta  en el que escribí: "una vez cumplida nuestra función, se nos elimina, mientras que los genes, en cambio, se encuadran en el tiempo geológico: los genes son eternos". En el banquete con que se cerraba una conferencia en Estados Unidos, recité el mismo mensaje en verso:

Un gen egoísta muy andarín
dijo: "Tantísimos cuerpos ya ví.
Se creen muy despiertos
pero yo soy eterno.
No son más que mis máquinas de sobrevivir".

Y para la inmediata respuesta del cuerpo al gen, parodié la mismísima Canción para arpa de las mujeres danesas que he citado más arriba:

¿Qué cuerpo es ese que tomas primero,
Lo haces crecer y abandonas luego
para huir con el viejo relojero ciego?"

Me fascinó Dawkins cuando me lei el gen egoista en tiempos de la facultad recomendado por un profe fanático de la sociobiologia evolutiva o etología. Lo encontré mohoso en una caja en la última mudanza y me volví a releer el capítulo de la teoria de juegos evolutiva. En una libreria portuguesa este agosto me topé con su último libro en portugés y casi me lo pillo solo por las ilustraciones, aunque me lo pensé mejor por el esfuerzo de entenderlo. Apareció en casa como regalo de cumple y aquí ando fascinado de nuevo en un viaje fantástico, la peregrinación humana junto al resto de seres vivos en busca del ancestro primigenio para de paso entender un poco como hemos llegado a ser lo que somos. Fue Dawkins uno de los impulsores de la campaña: "Probablemente dios no existe, deja de preocuparte y disfruta la vida". Pues eso.

1 comentario:

  1. Dan ganas de leer a este hombre y me encanta la frase final,...deja de preocuparte y disfruta la vida!

    besitos

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